Controlo las excusas y coloco
el recuerdo maldito en un baúl
que espero no me siga en este inicio
ya que tiene prohibido su retorno
Quieren volver infatigablemente
las luces que atraías a tu paso
y si llegan a acercarse demasiado
se confunden de pasaje,
por no saber reconocer en mí
las consignas de amor que nos unían
Solo quiero demostrarme que sin ti
seré también recipiente del amor
aunque me haya provisto lo vivido
de matices que quedarán conmigo
Y es que no sé porque sigo lanzando
mi voz al etéreo son de un llanto
si no salí jamás de mi mutismo
en torno a la dificultad
que nos acabó agotando
No estoy segura con esta cicatriz
que a veces sangra
si pierde la armonía,
cerró en falso quizás en aquel día
que presintiendo el desafío
huyó por estar repleta
de un cruel y silencioso frío.
2 comentarios:
¿Dónde va a mirar que no lastime? pues al frente siempre, porque los recuerdos están bien cuando se traen al presente solamente para coger fuerzas.
Un bello poema que me ha hecho pensar no solamente en eso, sino en algunas cosas más.
Un abrazo
De verdad así es Shikilla, al frente siempre. Pero cierto que a veces vienen a la mente historias cerradas en falso, para hacernos recordar algunos errores importantes, que al fin son el tributo debido a la experiencia.
Lo interesante de vivir es aprender a resumir nuestro camino anterior, para tomar solo lo que nos ayude a seguir creciendo y no lo que pretenda paralizarnos.
En cualquier caso una tarea a la que debemos prestar atención.
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